Si quieres conocer las cascadas del Pirineo Catalán más espectaculares y llenas de fuerza, acompáñanos en este recorrido que haremos por las montañas y los valles de la zona oriental de la cordillera pirenaica.
Las cascadas del Pirineo Catalán son como las montañas que las acogen: hermosas, agrestes y llenas de fuerza.
Quien conozca el Pirineo, sabrá que lo que en el Pirineo Aragonés es grandeza y majestuosidad, con imponentes moles calizas dominándolo todo, en el Pirineo Catalán es fuerza y belleza granítica que acoge infinidad de lagos y maravillosos saltos de agua.
Esta naturaleza tortuosa del norte de Cataluña es el lugar idóneo para que en las provincias de Lérida (Lleida) y Gerona (Girona), se encuentren algunas de las cascadas más bonitas de España.
¿QUÉ ENCONTRARÁS AQUÍ?
- 1 Las Cascadas del Pirineo Catalán de la Provincia de Lérida (Lleida)
- 2 Las Cascadas del Pirineo Catalán de la Provincia de Gerona (Girona)
- 3 Descubre otros lugares únicos de Pirineos
- 3.1 Ruta por los Miradores de Ordesa, un recorrido a vista de pájaro
- 3.2 Ruta por el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici
- 3.3 Ruta al Ibón de Plan o Basa La Mora, un lago legendario de los Pirineos
- 3.4 Conoce el románico de las iglesias del Valle de Boí
- 3.5 La ruta de las ermitas de Tella: entre brujas y tormentas
- 3.6 Ruta por el valle de Bujaruelo en la reserva de la biosfera Ordesa-Viñamala
Las Cascadas del Pirineo Catalán de la Provincia de Lérida (Lleida)
Vamos a comenzar nuestro recorrido por la Provincia de Lérida (Lleida), tomando el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici como referencia para nuestro recorrido por los valles del Pirineo Leridano.
Cascadas del Valle de Espot
El impresionante y largo Valle de Espot labrado por el Río (Riu) Escrita, es la entrada principal al Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici por su lado oriental, siendo la vía ideal de entrada si se quiere visitar el lago que da nombre al parque.
Cascada de Ratera
Para llegar hasta esta cascada, lo mejor es que en la localidad de Espot tomes el taxi todoterreno que remonta todo el Valle de Espot y que te sube hasta la mismísima orilla del Estany de Sant Maurici.
Se trata de una de las masas de agua más fotogénicas de España con la imagen de Els Encantats al fondo, aunque si lo que quieres es poder juzgar por ti mismo, te invito a que leas este post sobre los lagos de montaña de España que merece la pena visitar, y de muchos de los cuales te hablaremos en este post.
Una vez en el lago, bordéalo por su margen derecha según lo ves de frente. El camino te llevará en poco tiempo hasta la Cascada de Ratera, que cae ruidosa y salvaje desde el lago del mismo nombre.
Es una cascada de dimensiones considerables y con un desnivel importante y, si es verano y quieres hacer una buena foto, tendrás que hacer cola, porque se pone a tope de gente que quiere inmortalizarse junto a ella.
El Estany de Sant Maurici es el centro neurálgico del lado oriental de este privilegiado enclave natural y, desde él parten multitud de rutas senderistas a otros tantos lagos de montaña. Si quieres conocer una de las más bonitas e interesantes, lee este post de nuestra ruta por el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici.
Cascadas del Valle de Cardós
Dejando atrás Espot por la carretera que sale del valle, saldremos al gran Valle de Aneu que las aguas del caudaloso Río Noguera Pallaresa han labrado durante miles de años.
Desde el Valle de Aneu es fácil acceder al Valle de Cardós. Basta dirigirse hasta Llavorsí y allí tomar la carretera que remonta aguas arriba el curso del Río Cardós hasta Tavascán.
Cascada de Lleret
Antes de llegar a Tavascán verás a tu izquierda un desvío a Aineto, que es nuestro destino y el inicio de la ruta para llegar hasta la Cascada de Lleret.
Hay que tomar en Aineto el camino que en poco más de una hora te llevará a Lleret. El recorrido es fácil, aunque un poco incómodo en alguna zona con gran acumulación de piedras. Poco antes de llegar a Lleret, hay un desvío que te acercará hasta la cascada del mismo nombre.
Cascadas del Valle de Ferrera
Si te fijaste cuando empezaste al remontar el Valle de Cardós, como a unos 4 km de Llavorsí había una glorieta en la que tomaste la segunda salida hacia Tavascán. Ahora tomaremos la primera salida que se dirige hacia Àreu.
Cascada de Boet
Tras tomar esa salida, te internarás en el Valle de Ferrera bañado por las aguas del Río Noguera de Vallferrera, que remontándolo nos llevará hasta Àreu.
En Àreu hay que tomar la pista que finaliza en el aparcamiento de la Molinassa, lugar donde hay que estacionar el vehículo.
A partir de aquí hay que continuar remontando el curso del río a pie, para en pocos minutos llegar al Pla de Boet, una llanura idílica en la que antiguamente había un lago colmatado por los sedimentos.
Nuestra cascada se encuentra al fondo de este falso llano.
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Cascadas del Valle de Bonaigua
Volviendo al Valle de Aneu, ahora hay que enfilar hacia su parte alta. Desde allí tendrás que dirigirte hacia las pistas de esquí de Baqueira-Beret, que se encuentran situadas en el puerto de montaña que cierra el Valle de la Bonaigua y que hace de paso entre el Valle de Arán y el resto de la Provincia de Lérida.
Cascada de Gerber
A medio camino de la subida por el puerto se encuentra nuestro próximo destino.
Cuando la gente circula en coche por el Puerto de la Bonaigua, se encuentra con que, a medio camino de subida queda a su izquierda una impresionante cascada, de la que casi nadie disfruta porque va pendiente de las muchas curvas de la carretera.
Esta cascada cae desde el Lago Gerber, otro de los lagos de montaña que te hemos recomendado al principio de este post y, es de las menos visitadas que nos hemos encontrado, por lo difícil que estacionar el coche para verla.
El truco está en fijarse en una entrada de la carretera que queda a tu izquierda según subes hacia el Valle de Arán, en una curva pronunciada a la derecha. Estate atento por si hay coches ya estacionados, porque no creo que quepan más de tres o cuatro.
Una vez allí, hay un sendero que parece de cuento y que te lleva entre los abetos hasta el mirador de esta inmensa y solitaria cascada en la que podrías estar horas viendo caer el agua.
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Cascadas del Valle de Arán
Ya en el mágico Valle de Arán, vamos a visitar unas cuantas cascadas interesantes siguiendo la carretera que recorre el valle en dirección a la frontera con Francia.
Te advierto, que en el Valle de Arán hablan aranés, una variante del idioma occitano, por lo que te traduciremos algunas de las palabras más importantes para que te sea más fácil encontrar tus destinos.
Salto (Sauth) d’Aigües Tòrtes
Nuestra primera parada se encuentra al poco de entrar en el Valle de Arán, en la localidad de Salardú. Aquí encontraremos una glorieta en la que viene señalizado el desvío al Balneario Baños (Banhs) de Tredòs.
Hay que seguir la estrecha carretera que tras poco más de 8 km de recorrido finaliza en el balneario. Justo antes de llegar, verás a la izquierda un aparcamiento donde podrás dejar el vehículo.
Desde aquí parte el camino que, remontando el curso del Río (Arriu) Aiguamòg, se dirige hacia los famosos Lagos (Estanhs) de Colomers. Al cabo de un rato andando, y antes de llegar a los lagos, nos encontraremos la bonita cascada que estamos buscando.
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Cascada (Gotér) de Molières
Siguiendo nuestro recorrido por el Valle de Arán, llegarás a Vielha, su población capital.
Aquí es posible tomar la carretera que comunica esta población con la ciudad de Lérida, atravesando las montañas gracias al famoso Túnel de Vielha.
Justo a la salida del túnel, queda a tu derecha el Valle de Molières, donde ya lo habrás adivinado, se encuentra nuestra cascada.
A medio kilómetro de salir del túnel, verás que a tu derecha hay una salida donde es posible estacionar el coche y, de donde parte un camino que discurre junto al curso del Río Ribereta, llevándote hasta su nacimiento en los Lagos (Estanhòst) de Molières en la parte alta del valle.
A medio camino de subida y, tras superar la Pleta de Molières, habrás llegado a la cascada.
Sauth deth Pish
Hay que recorrer casi todo el Valle de Arán en dirección a Francia y llegar hasta la localidad de El Pont d’Arròs, para poder acceder a este importante salto de agua.
Por el mismo pueblo pasa el Río (Arriu) Varradòs y, paralela al mismo y remontando su curso, discurre una pista asfaltada que en unos 12 km te conducirá hasta el Plan des Artiguetes, lugar donde estacionaremos el coche.
A partir de aquí y, caminando un pequeño trecho, llegaremos hasta esta estupenda cascada que es la más grande de todo el Valle de Arán. Se trata de un salto con más de 15 metros de desnivel total.
A la belleza de la cascada se une que además cuenta con unas vistas maravillosas e inolvidables, pues según caminas por el prado que te lleva hasta ella, es visible al fondo el Pico Aneto, el más alto de los Pirineos con 3.404 metros de altura.
Uelhs deth Joeu
En nuestro post sobre el Valle de Benasque titulado ruta al Forau d’Agualluts, te contábamos que las aguas de deshielo del Glaciar del Aneto, se colaban por ese sumidero endokárstico para salir posteriormente por el Valle de Arán, tras aproximadamente cuatro kilómetros de recorrido subterráneo.
Su salida no puede ser más espectacular, pues es la que da lugar a la cascada llamada Uelhs deth Joeu u Ojos del Diablo, una estruendosa cascada situada en un entorno realmente maravilloso.
Para llegar hasta ella deberás continuar el camino que llevábamos en dirección a Francia y, en la localidad de Las Bordas, tomar el desvío que en 12 km te deja en el aparcamiento de la Artiga de Lin.
La Artiga de Lin es un conjunto de preciosas llanuras de alta montaña, muy famosas en el Valle de Arán, desde las que se accede al vecino Valle de Benasque, ya en el Pirineo Aragonés.
Como medio kilómetro antes de llegar al aparcamiento de la Artiga de Lin, hay otro aparcamiento situado junto a la cascada que queremos conocer.
Sauth d’Arbaet
Nuestra última cascada se encuentra cerca de Pontaut, el último pueblo del Valle de Arán antes de entrar ya en Francia.
Aquí hay que coger el desvío a la derecha que lleva hasta Canejan y, tras unos 3,5 km de recorrido y nada más pasar sobre el Río Toran, tomar la estrecha carretera que sale a la derecha.
Un kilómetro más adelante, justo antes de volver a cruzar sobre el río, hay un pequeño aparcamiento donde podemos estacionar y continuar andando unos pocos metros, hasta llegar a la cascada que está a la derecha de la carretera.
El salto es modesto pero muy bonito, y sorprende encontrárselo junto a esta carretera tan apartada de todo.
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Cascadas del Valle de Boí
Ha llegado el momento de desandar todo el camino que hemos hecho desde que llegamos a Vielha para volver a aproximarnos al Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici.
Desde la capital del Valle de Arán tendrás que enfilar hacia el sur cruzando el Túnel de Vielha y dirigirte hacia Pont de Suert. Poco antes de llegar a esta localidad, hay que coger el desvío a la izquierda que te introducirá de lleno en el Valle de Boí.
Si hay algo por lo que este valle es mundialmente conocido, es por su conjunto de iglesias románicas del Valle de Boí, uno de los más bellos y armoniosos de todo el Pirineo y de España.
Este valle es la puerta principal de entrada al Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici por su lado occidental, menos agreste que el oriental, pero también lleno de belleza.
Cascada de Sant Esperit
La ruta más famosa de esta zona del parque nacional es la llamada “ruta de la nutria”, que remonta el curso del Río Sant Nicolau y en la que encontraremos nuestra cascada.
Tendremos que dejar el vehículo estacionado en el aparcamiento de la Palanca de la Molina, al que se llega tomando un desvío que se encuentra a medio camino entre Erill la Vall y Caldas de Boí.
Desde aquí remontaremos andando el curso del río, flanqueado por un precioso bosque mixto, hasta llegar al Estany de la Llebreta. Sólo nos queda remontar un poco más para llegar a la estupenda Cascada de Sant Esperit, uno de los rincones más bonitos del parque nacional, en el que la fuerza erosiva de las aguas ha labrado profundas marmitas de gigante.
Si continúas subiendo un poco más hasta el Planell de Sant Esperit o Aigüestortes, podrás ver los meandros que hace el Río Sant Nicolau para atravesarlo y por los que el parque recibe parte de su nombre de “aigüestortes” o aguas tortuosas.
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Cascadas del Valle Fosca
Para finalizar nuestro recorrido por las cascadas de la Provincia de Lérida, debemos coger otra vez el coche para conducir durante un buen trecho hasta la localidad de Capdella, ya dentro del Valle Fosca.
Este valle es la puerta de entrada al Parque Nacional de Aigüestortes i Estani de Sant Maurici por su lado meridional. Cuenta además con un teleférico que, desde el Estany de Sallente, supera 450 m de desnivel y te deja en la cota 2.200 m, desde donde puedes hacer numerosas rutas a pie por los 32 lagos que hay en esta zona del Parque Nacional.
Cascada de Riqüerna o de Rus
Desde la localidad de Capdella sale el llamado Camino de Rus, que discurre paralelo al curso del Río Riqüerna y, que en tiempos era utilizado como vía de comunicación entre este valle y el vecino Valle de Boí.
Hay que hacer más de 4 km de recorrido de este camino, lo que implica superar un desnivel de algo más de 450 m, hasta llegar a la espectacular Cascada de Riqüerna, una de las más escondidas y desconocidas del Pirineo Catalán.
Las Cascadas del Pirineo Catalán de la Provincia de Gerona (Girona)
Después de haber hecho un largo recorrido por el norte de la Provincia de Lérida, tendrás que abandonarla y dirigirte al Valle de Nùria, en el norte montañoso de la Provincia de Gerona, para conocer algunas de las cascadas más desconocidas de todo el Pirineo Catalán.
Cascadas del Valle de Nùria
Famoso por su estación de esquí, el Valle de Nùria tiene como elemento histórico más representativo el Santuario de la Virgen de Nùria.
Cascadas del Río Nùria
Para llegar hasta este Santuario situado a 2.000 metros de altura, hay que acceder desde la localidad de Queralbs, después de superar los más de 850 metros de desnivel que hay entre los dos puntos.
Como nuestro objetivo es ver cascadas, prescindiremos del tren cremallera que por 25 € hace el recorrido de subida en 20 minutos, así que haremos el camino a pie.
Tomaremos la ruta que parte de Queralbs y que discurre paralela al trazado del tren cremallera. No tiene pérdida, ya que está señalizada con marcas rojas y blancas, al ser parte del Sendero de Gran Recorrido Transpirenaico GR-11.
A medida que vas ascendiendo por el valle formado por el Río Nùria, verás varias cascadas muy interesantes, que complementan a la perfección la belleza del paisaje de montaña que se ofrece ante ti.
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Las Siete Cascadas del Torrent de la Cabana
Abandonando el Valle de Nùria en dirección sur, llegarás a Campdevànol, donde te espera una de las sucesiones de cascadas más bonitas de todo el Pirineo Catalán.
Hay que salir de Campdevànol en dirección oeste por la GI-401 y, a 3 km salir de la carretera a la izquierda por un desvío no muy bien señalizado. Al poco de dejar la carretera principal, se llega a la zona habilitada como aparcamiento.
Tendrás que seguir a pie por el camino por el que venías en coche. Poco a poco te acercarás al Torrent d’Estiula, que es el río en el que se va produciendo la sucesión de cascadas que queremos contemplar, para acabar discurriendo paralelo al mismo.
El camino tiene un total de unos 5 km de largo sólo de ida, con lo que tendrás que tener en cuenta el tiempo de regreso.
Según vas caminando por la ruta señalizada, pasarás por las Cascada (Gorg) de la Cabana, de la Tosca, de la Bauma, de l’Olla, del Forat, del Petit Colomer y del Colomer.
La tipología de estas cascadas es muy parecida en todas ellas, ya que se trata de una cascada que cae en una piscina de aguas cristalinas en las que es habitual encontrar a gente nadando y, eso a pesar de lo fría que está el agua.
Aunque parecidas, todas las cascadas son dignas de ver y cada una tiene sus características peculiares que la diferencian de las demás.
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Hasta aquí llega este recorrido por las Cascadas del Pirineo Catalán más conocidas. Seguro que tú conoces alguna que nos falta en esta lista, así que te agradeceríamos que nos lo indiques en los comentarios, porque siempre hay mucho que visitar y más que aprender.
Si tienes ganas de conocer más cascadas pirenaicas cercanas a las catalanas, te recomendamos que visites nuestro post sobre las cascadas del Pirineo Aragonés, y si lo que te apetece es pasar al lado francés de la cordillera, no te pierdas nuestro post sobre el Circo de Gavarnie.
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