12 lugares que ver en Comillas, la villa modernista de Cantabria

Si estás buscando los lugares más bonitos de Cantabria, te gustará conocer todo lo hay que ver en Comillas, una joya escondida en la costa occidental de Cantabria que no te puedes perder.

Si todavía no conoces Comillas, después de leer este artículo estarás deseando hacer las maletas y salir corriendo hacia allí.

Es uno de los lugares más especiales del norte de España, que llevo visitando desde que era una niña, por lo que no puedo dejar de recomendártelo. Comillas lo tiene todo: playas impresionantes, naturaleza, arquitectura tradicional y modernista, cultura, historia y una gastronomía deliciosa. ¿A que suena bien?

Comillas está situada a 50 km de Santander, entre Santillana del Mar y San Vicente de la Barquera. Y, aunque fue una de las villas más importantes de la región en el pasado, actualmente sigue siendo uno de los destinos más bonitos y populares de Cantabria.

Aunque es un lugar muy turístico, especialmente durante el verano, te recomiendo visitar Comillas en cualquier época del año. De hecho, si vas fuera de temporada alta, podrás disfrutarlo al máximo sin las multitudes de turistas que recorren sus calles.

Un poco de historia de Comillas

Para empezar, es importante conocer la historia de la villa para comprender por qué es un lugar tan especial.

Durante la Edad Media, Comillas era una pequeña población que se dedicaba principalmente a la pesca, destacando como puerto ballenero, y la agricultura.

Fue durante el siglo XIX cuando su historia dio un giro gracias a su vecino más ilustre: Don Antonio López López, un hombre de origen humilde hecho a sí mismo, que emigró a Cuba con 14 años y volvió con una gran fortuna. Fundó importantes empresas navales y tabacaleras en Barcelona y, por sus aportaciones para la guerra de Cuba, el rey le otorgó el título de Marqués de Comillas. Como no se olvidó de sus raíces, comenzó a invertir en su villa natal.

Desde entonces, Comillas experimentó un crecimiento notable. Alfonso XII, invitado por el Marqués, comenzó a veranear en cuatro casas familiares acondicionadas para la corte, lo que atrajo a nobles y adinerados a la comarca. Como curiosidad, durante la primera visita del rey, Comillas se convirtió en capital de España por un día, ya que allí reunió al Consejo de Ministros y, también, en la primera localidad española con luz eléctrica en sus calles, que fue iluminada con el nuevo invento de Edison al paso del rey.

El Marqués llevó a Comillas el estilo modernista, tan en boga en la época, de la mano de los mejores arquitectos, como Antonio Gaudí y Lluís Domènech i Montaner (profesor de Gaudí). Comenzó a construir un palacio y un panteón en la finca de Sobrellano, que se completaron tras su muerte.

Su hijo, Don Claudio, el segundo Marqués de Comillas, mantuvo una buena relación con el rey y gastó gran parte de su fortuna en obras benéficas. Fundó la Universidad Pontificia y, aunque el edificio fue construido para los Jesuitas, Don Claudio se lo ofreció al Papa, que le otorgó el título de Pontificia.

A finales del siglo XIX, Comillas se había convertido en uno de los lugares de veraneo más prestigiosos del Cantábrico y continúa siéndolo hoy en día. Sólo hay que ver la cantidad de palacetes de familias nobles y adineradas que se encuentran diseminados por la villa y, que siguen siendo ocupados durante el verano.

Si te gusta la historia, te recomiendo apuntarte a una visita guiada por Comillas, en la que podrás recorrer sus calles a la vez que completas tus conocimientos sobre esta preciosa villa.

Mapa de lugares destacados de Comillas

Descubre los 12 lugares imprescindibles que ver en Comillas

💡 Para conocer lo mejor del centro de Comillas, lo ideal es hacer un free tour. Así, podrás visitar los lugares más importantes y conocer su historia de forma gratuita. Solo tienes que dejar una donación a tu gusto.

Palacio de Sobrellano

El Palacio de Sobrellano, también conocido como Palacio del Marqués de Comillas, es la principal joya arquitectónica que tienes que ver en Comillas. Aunque el marqués no tuvo la oportunidad de ver su obra finalizada, su legado continúa impresionando a todos los que lo visitan.

Construido en 1888 por el reconocido arquitecto catalán Joan Martorell, este palacio de verano fue un encargo del primer Marqués de Comillas, Antonio López López. Su majestuoso estilo neogótico y su gran tamaño, similar a los palacios venecianos, te dejará sin palabras.

Puedes aparcar tu coche en el parking de la calle del Marqués de Comillas para subir a pie y, apreciar mejor la belleza del camino que te lleva al palacio. Su impresionante fachada de estilo neogótico-modernista te cautivará.

Si no quieres visitar el palacio, puedes admirar su fachada de forma gratuita desde el jardín de Sobrellano y, puedes acceder libremente al mismo hasta media hora antes del cierre del palacio. Pero te aconsejo que no pierdas la oportunidad de conocer su interior, en cuyo caso deberás reservar una visita guiada, ya que no se permite el acceso libre.

La visita guiada por su interior dura 45 minutos y, durante el recorrido, podrás admirar el mobiliario original diseñado por Antonio Gaudí y las pinturas murales de Eduardo Llorens, los suelos de roble y ébano, las diferentes estancias, el espectacular hall con su impresionante escalera de alabastro…

Además, descubrirás algunos datos curiosos, como que este fue el primer edificio de España en utilizar la luz eléctrica. Merece muchísimo la pena visitarlo, es un lugar en el que no podrás dejar de fotografiar cada uno de sus rincones.

Puedes comprar las entradas online a través de la web oficial o en la taquilla directamente. En cualquier caso, tienes que estar allí 10 minutos antes de cada visita.

Capilla Panteón de los Marqueses de Comillas

Junto al Palacio de Sobrellano se encuentra la impresionante Capilla Panteón, una verdadera joya arquitectónica que ha sido declarada Bien de Interés Cultural. Fue el primer edificio modernista que se construyó en Comillas, diseñado como una catedral en miniatura es, sin duda, uno de los lugares más bonitos que tienes que ver en Comillas.

La Capilla Panteón fue construida en 1878, por lo que su construcción fue anterior a la del palacio. También fue diseñada por el famoso arquitecto Joan Martorell, y cuenta con una girola en su estructura.

En la planta inferior se encuentra el panteón con los mausoleos de mármol de los Marqueses de Comillas, mientras que en la planta superior encontrarás una capilla donde todavía se celebran misas y oficios religiosos.

La decoración exterior destaca por las bonitas gárgolas y la alta torre con su pináculo, mientras que en su interior podrás disfrutar de un magnífico altar, vidrieras policromadas, pinturas de Llorens y Masdeu, y esculturas de Josep Llimona y los hermanos Vallmitjana. Además, los muebles diseñados por el famoso arquitecto Gaudí, como el sitial, los reclinatorios, el confesionario y los bancos, son únicos y añaden un toque especial al ambiente.

Para visitarlo tienes que comprar una entrada aparte de la del palacio y el horario de visita y el precio es el mismo. El aforo es muy limitado, por lo que te recomiendo reservar con antelación, si quieres visitar los dos edificios reserva los dos horarios seguidos en esta página web, para no perder tiempo. Las visitas son a las horas en punto.

El Capricho de Gaudí

Para culminar este trío de fabulosas construcciones en el Parque de Sobrellano, no puedes perderte La Villa Quijano, más conocida como El Capricho de Gaudí, una maravilla modernista y una de las joyas que tienes que ver en Comillas.

Este palacete de cuento de hadas, construido entre 1883 y 1885 como residencia de verano del indiano Máximo Díaz de Quijano (concuñado del Marqués de Comillas), es una de las pocas obras que el genial Gaudí diseñó fuera de Cataluña y se ha convertido en el principal reclamo turístico de Comillas, con más de 100.000 visitas al año.

La fachada de estilo oriental, con una colorida torre cilíndrica a modo de minarete, de 20 metros de altura, completamente revestida de cerámica, es simplemente impresionante. Además, las formas redondas y sinuosas del edificio lo hacen especialmente peculiar, pero son los detalles orientales, góticos, islámicos y mudéjares lo que le da un toque verdaderamente único.

Los girasoles de cerámica del exterior y el invernadero interior, que ilumina todas las salas, son elementos inspirados en la naturaleza que te dejarán con la boca abierta.

Si eres un amante de la música, no te pierdas la barandilla de hierro forjado con motivos musicales, así como algún pentagrama oculto en la fachada. Es un pequeño detalle que Gaudí incluyó en honor al gran pianista Máximo Díaz.

Reservar una visita guiada es una excelente forma de conocer la historia del edificio y de su arquitecto, así como de disfrutar de un tour por Comillas. Pero si prefieres visitarlo por tu cuenta, también puedes reservar la entrada con antelación desde esta página.

¿Cuánto tiempo se tarda en ver el Capricho de Gaudí?

Aunque se recomienda un tiempo mínimo de 30 minutos, si quieres hacer una visita completa por libre, te aconsejo que dediques, al menos, una hora. Durante este tiempo, podrás recorrer las diferentes estancias del edificio, conocer su historia y disfrutar de todos los detalles su arquitectura única. También tendrás la oportunidad de hacerte unas fotos preciosas en un lugar de cuento, visitar la tienda de souvenirs y llevarte un recuerdo de tu visita.

En cambio, si realizas la visita guiada, esta te llevará 45 minutos. Puedes reservar una visita guiada desde aquí:

Centro histórico de Comillas

Aunque la visita a estos tres monumentales edificios por si sola, ya justifica un viaje a Comillas, la villa tiene muchos más secretos que están esperando que los descubras.

No dejes de recorrer el centro histórico de Comillas, para descubrir su enorme patrimonio arquitectónico y sus bonitas plazas. Podrás descubrirlo todo a través de un relajado paseo, ya que todo está cerca.

El centro histórico de Comillas ha sido declarado Conjunto Histórico-Artístico. Disfruta de un paseo relajante por el centro histórico de Comillas y sumérgete en la rica historia y cultura de la villa. Durante tu recorrido irás descubriendo todos estos lugares:

La Fuente de los Tres Caños

La Fuente de los Tres Caños es otra de las cosas que ver en Comillas. Esta bonita fuente seguro que te llama la atención en tu recorrido por el centro histórico.

Es otra de las obras de Lluís Domènech i Montaner en Comillas, y fue realizada como homenaje a Joaquín del Piélago, el yerno del primer Marqués de Comillas, quien financió la canalización de las aguas del pueblo.

Tiene una decoración preciosa a base de motivos vegetales, florales y ángeles. Está coronada por una farola, la primera con luz eléctrica gracias al motor de vapor que el marqués llevó al pueblo, con motivo de la visita del rey.

La Casa Ocejo

Ubicada muy cerca de la Fuente de los Tres Caños encontrarás la Casa Ocejo. Es un bonito edificio de estilo indiano, que fue comprado para la madre del Marqués de Comillas y donde la familia pasaba los veranos, antes de la construcción del Palacio de Sobrellano. Allí se alojó el Rey Alfonso XII la primera vez que visitó Comillas y en ella celebró un Consejo de Ministros.

Iglesia Parroquial de San Cristóbal

Otro de los lugares que tienes que ver en Comillas es la iglesia de San Cristóbal, que es mucho más que un lugar de culto. Su historia es una de las más peculiares de la villa, que se remonta a la época en que se construyó el templo.

La construcción de la iglesia de San Cristóbal comenzó en el año 1648, después de un incidente ocurrido en 1617 durante la misa del domingo en la antigua parroquia, que se encontraba en el lugar del cementerio actual. Una anciana ocupó uno de los asientos del templo que estaba destinado al Duque del Infantado y fue obligada a levantarse de allí, el pueblo indignado y harto de su opresión decidió no volver a esa iglesia, que fue abandonada, y construir una nueva.

Así, durante varios años, cada vecino dedicó un día a la semana para trabajar en la construcción de la iglesia. Trabajaron duro y aportaron su dinero y sus esfuerzos para que este lugar de culto fuera una realidad. Casi un siglo después, en 1748, se ofició aquí la primera misa.

Desde entonces, la iglesia de San Cristóbal ha sido testigo de la devoción de los habitantes de Comillas hacia su patrón, el Cristo del Amparo, el cual se encuentra en su interior.

Continúa tu caminata por el pueblo para conocer otros lugares importantes de Comillas, como:

• El Ayuntamiento actual (donde se encuentra la Oficina de Turismo).
• La Cárcel.
• El Ayuntamiento Antiguo con sus soportales, que fue levantado sobre las ruinas de la ermita de San Juan y el antiguo Hospital de peregrinos. Aquí verás cinco escudos de los cinco arzobispos que hicieron que Comillas fuese conocida como la «Villa de los Arzobispos«.
• El Espolón, un edificio que ahora se dedica a actividades culturales,
• La Plaza del Corro de San Pedro, con sus casas montañesas del siglo XVIII.

Algunas de las casas más impresionantes que ver en Comillas se encuentran un poco más lejos del centro histórico. Algunas de ellos son La Coteruca, la antigua casa de verano de la familia Riera, que ahora se ha convertido en apartamentos, el antiguo Hospital de Comillas, que ahora es una residencia de ancianos o, la Casa del Duque de Almodóvar del Río, un edificio de influencia inglesa precioso, que se alquila para bodas.

Antigua Universidad Pontificia de Comillas o Seminario Mayor

La antigua Universidad Pontificia de Comillas es uno de los tesoros arquitectónicos más bellos de España, fue terminada en 1892 con el patrocinio de Antonio López y López y de su hijo Claudio López.

Aunque está bastante apartada del centro histórico, se puede acceder andando, aunque tienes que tener en cuenta que al final el camino es de subida. De niña hice este recorrido muchas veces. Pero, si no tienes mucho tiempo también puedes acceder en coche. Se encuentra situada en lo alto de una colina, y puedes llegar fácilmente a través de un desvío que hay en la carretera que va de Comillas hasta San Vicente de la Barquera.

Esta universidad fue construida para la formación de jóvenes sacerdotes, aunque la idea inicial del Marqués de Comillas es que fuese un colegio de los jesuitas para niños sin recursos. Ante la negativa de los jesuitas, dado que Comillas se encontraba bastante mal comunicada y con poca población, consiguieron que el Marqués optase por construir un seminario.

El resultado es este impresionante edificio, que combina elementos modernistas con estilo neogótico-mudéjar. Aunque fue diseñado por el arquitecto catalán Joan Martorell i Montells, la finalización de la obra estuvo a cargo de Lluis Domènech i Montaner, que introdujo algunos cambios.

Una vez que hayas cruzado la magnífica portada de entrada, deberás ascender hasta el edificio principal en ladrillo de color rojo, conocido como Seminario Mayor. Allí te sorprenderás con su impresionante puerta de bronce, llamada Puerta de las Virtudes.

En su interior te espera la escalera monumental, el techo del edificio principal con un artesonado de madera, el claustro o los mosaicos de la iglesia, que está recién reformada. ¡Te parecerá estar dentro de Hogwarts!

Durante mucho tiempo ha estado cerrada a las visitas. Hace muchos años tuve la oportunidad de visitarla cuando estaba cerrada al público y pasar la noche en su interior. Fue una experiencia única, sobre todo, porque en esa época no tenía luz eléctrica y ver su decoración a la luz de una linterna es bastante sobrecogedor.

Volví a visitarla después de su restauración y te recomiendo totalmente que realices una visita guiada, para que descubras todos los detalles y secretos de este lugar, que siendo una maravilla es uno de los menos visitados de Comillas.

No te pierdas tampoco las vistas espectaculares del pueblo, del Palacio de Sobrellano y del mar desde su jardín.

Cementerio de Comillas

Situado en una colina, el cementerio cuenta con una rica historia que se remonta al siglo XVII, cuando la iglesia parroquial ocupaba este lugar. En 1893, Lluís Domènech i Montaner realizó una ampliación del cementerio, conservando las ruinas de la iglesia gótica anterior y construyendo una impresionante fachada de acceso, mausoleos y la icónica estatua del Ángel Exterminador de Llimona.

Aunque pueda parecer extraño que te recomiende visitar un cementerio, podrás comprobar que este lugar tiene mucho encanto y, hay muchas razones para visitarlo. De hecho, ha sido nombrado como el cementerio más bonito del mundo, por eso se suele incluir en cualquier listado de lugares que ver en Comillas.

Desde su ubicación en la cima de una colina, donde podrás disfrutar de impresionantes vistas del mar, hasta las románticas ruinas de la antigua ermita gótica que te dejarán sin palabras. Además, la estatua del ángel es un verdadero ícono del cementerio y no puedes dejar de verla. En realidad esa escultura estaba destinada a la Capilla del Palacio de Sobrellano, pero como no cabía, por ser demasiado grande, terminó por colocarse en el cementerio de Comillas.

Puerta de Moro o Puerta de los Pájaros

Es uno de los secretos de Comillas. La Puerta de los Pájaros o Puerta de Moro fue diseñada por Gaudí y, aunque inicialmente estaba proyectada para una casa de Barcelona, terminó en Comillas, como cerramiento para la conocida Casa de Moro, otro de los palacetes espectaculares que encontrarás en Comillas.

Tiene detalles únicos que la convierten en una obra de arte. Las esquinas redondeadas y los tres huecos hacen que su diseño sea único y fascinante. Y hablando de los tres huecos, ¿sabías que uno de ellos está destinado a los pájaros? ¡Así es! El hueco circular en la parte superior derecha de la puerta fue diseñado especialmente para que los pájaros puedan entrar y salir libremente.

Mirador de Santa Lucía

Se encuentra ubicado a un lado de la Ermita de Santa Lucía, en cuyo interior se encuentra una talla de Santa Lucía a quien los pescadores se encomendaban antes de salir a faenar a la mar. Desde el mirador de Santa Lucía disfrutarás de unas vistas espectaculares del pueblo y la playa.

Es el lugar perfecto para admirar y disfrutar del impresionante paisaje, ideal para relajarte, respirar aire fresco y contemplar la belleza que te rodea, seguramente en soledad.

Puerto y Playa de Comillas

Encontrarás la Playa de Comillas a tan solo 10 minutos caminando desde el centro de la ciudad . Es una playa pequeña, de arena fina y dorada, que tiene una longitud de un kilómetro y cuenta con todos los servicios que necesitas para pasar un agradable día de sol y chapuzones en las fresquitas aguas del Cantábrico.

Además, su paseo marítimo te conducirá al Puerto, que se encuentra en el extremo izquierdo de la playa y cuenta con un pasado ballenero. Este lugar está protegido de la fuerza de las mareas por un dique y cuenta con un pequeño faro, así como con un reducido número de barcos pesqueros. En el puerto hay una terraza en la que es típico ir a comer croquetas de calamares en su tinta.

Si dispones de tiempo, acércate a la magnífica Playa de Oyambre, que se encuentra situada a tan solo 4 kilómetros de Comillas, junto a la desembocadura de la Ría de la Rabia. Esta playa cuenta con unas dunas espectaculares y unas aguas de un color esmeralda que la convierten en una de las playas de Cantabria con más encanto.

¿Qué se puede hacer con niños en Comillas?

Si estás de visita en Comillas con niños, hay muchas opciones divertidas para disfrutar en familia.

De todos los lugares que se pueden ver en Comillas, la mejor opción para ir con niños es visitar el Capricho de Gaudí. Es un edificio tan singular que los niños sentirán que se encuentran dentro de un cuento.

A continuación, si no os interesa hacer la visita guiada por el interior del Palacio de Sobrellano, siempre podéis acceder a los jardines, que es totalmente gratuito, y contemplar su exterior, que es una maravilla.

Si los niños no son muy pequeños les puede encantar la visita a la Universidad de Comillas, ya que tiene una estética que les parecerá de película de Harry Potter.

Otra opción divertida para toda la familia es hacer una visita guiada por la ciudad. Comillas tiene una rica historia y muchos edificios interesantes que se pueden descubrir a través de una visita guiada. Los niños podrán aprender mientras se divierten explorando la ciudad.

En verano, un rato en la playa es una gran opción. Y si les apetece un rato de diversión en un parque infantil, hay uno en un lugar muy agradable dentro del Parque Güell y Martos, en el que también se encuentra el monumento modernista del Marqués de Comillas.

Otra de las opciones es visitar el Parque Natural de Oyambre. Este bonito espacio natural, cercano a Comillas, cuenta con impresionantes paisajes costeros y una amplia variedad de fauna y flora. Podéis hacer una caminata por los senderos, disfrutar de la playa o incluso hacer una ruta a caballo.

Otra opción interesante es visitar el Zoo de Santillana. A solo unos kilómetros de Comillas, este zoológico cuenta con una amplia variedad de animales, incluyendo leones, tigres, osos y jirafas… Aquí puedes comprar la entrada para el Zoo de Santillana.

Y si necesitas más ideas para visitar Cantabria con niños, aquí tienes nuestras mejores recomendaciones:

¿Qué puedes hacer en Comillas en un día?

Si solo dispones de un día para visitar Comillas, te recomiendo que sigas la Ruta Modernista, para que que aproveches al máximo tu tiempo y conozcas los lugares imprescindibles de Comillas.

Comienza tu día temprano en el centro de Comillas, donde podrás visitar el majestuoso Palacio de Sobrellano y la Capilla Panteón, esto te llevará unas dos horas. Tras la visita acércate hasta el precioso Capricho de Gaudí, que puedes visitar por libre para no perder demasiado tiempo.

A continuación, camina por las calles de Comillas, hasta encontrar la Fuente de los Tres Caños. Cerca de allí verás algunos restaurantes en los que puedes probar platos de la gastronomía local, como el cocido montañés, el rabo de toro o las riquísimas rabas de calamar. Si te gusta el marisco te recomendamos el restaurante Marisquería Adolfo, ¡vas a chuparte los dedos! Si vas fuera de temporada alta, es posible que encuentres algunos restaurantes cerrados, así que si buscas otra opción, podemos recomendarte El Carel, en el que destacan los pescados y su riquísima tarta de queso.

Tras la comida dirígete hacia la Antigua Universidad Pontificia, donde no puedes perderte la visita guiada.

Continúa hasta el cementerio de Comillas para ver la estatua del Ángel Exterminador y las románticas ruinas. Si no te gustan los cementerios, puedes pasar junto a él y contemplar la estatua, sin tener que entrar. Cerca de allí encontrarás el Parque Güell y Martos, en el que se encuentra el Monumento al Marqués de Comillas, con un curioso pedestal en forma de proa de barco y muchos elementos de inspiración marítima.

Dirígete hacia la Puerta del Moro, que tiene tres accesos: para coches, personas y pájaros, y que pertenece a la Casa de Moro. Antes de llegar hasta allí pasarás cerca de otra de las casas más bonitas de Comillas: la Casa del Duque de Almodóvar del Río, un curioso edificio, mezcla de chalet suizo y casona inglesa.

Desde allí tienes muy cerca la ermita y el Mirador de Santa Lucía, desde el que tienes unas vistas estupendas. No pierdas la oportunidad de bajar a la playa y, si dispones de tiempo, puedes acercarte hasta el puerto y el Mirador Comillas, desde el que se ve como rompen las olas y tienes una panorámica de toda la playa entera, así como del faro y la lonja.

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